Tres responsables de Antorcha tomaron parte ayer domingo en la primera ceremonia de la entrega de la simbología Gilwell: pañoletas Gilwell con sus dos tizones y el nudo Gilwell, de Scouts de Castilla y León.
La simbología Gillwell representa la progresión de los responsables scouts que han realizado el curso de Profundización Scout.
Pero ¿qué es la simbología Gillwell? ¿Cómo comenzó todo?
En la clausura del 21º campamento, aniversario de la aparición del Movimiento Scout, celebrado en Arrowe Park en 1.929, el rey Jorge V concedió a Sir Robert Baden-Powell el titulo de barón.
B.P. tomo para si el titulo de Lord Baden-Powell of Gilwell, pero…
Por que Gilwell?
Por que no Mafeking, cuyo asedio le hizo famoso?, O Pax Hill donde tenia su casa?. Ni siquiera había oído hablar de Gilwell hasta 1.918 y no obstante en once años paso a significar tanto para el que incluyo el nombre de dicho parque en su titulo…»
En 1.887 Baden-Powell estaba destacado en la ciudad del Cabo como Ayudante de Campo de su tío, el general Smyth, comandante general en África del Sur.
Poco después de su llegada al Cabo surgieron problemas con los guerreros zulúes, problemas creados por su jefe Dinizulu.
En ocasiones especiales Dinizulu usaba un collar con mas de un millar de cuentas de madera, de diversos tamaños, desde muy pequeñas hasta toscamente grandes.
El collar era considerado sagrado entre los guerreros y entre ellos había la creencia de que si algún día fuese capturado, toda la resistencia de los nativos se debilitaría.
El collar lo tenían dentro de una gruta en lo alto de una montaña y protegido celosamente día y noche. Cuando B.P. conoció esto pensó capturar a Dinizulu y a su famoso collar.
Consiguió cumplir su deseo y trajo para Inglaterra el collar junto con otros recuerdos de los tiempos militares.
Tuvieron que pasar mas de treinta años para que el fundador pudiese dar algún uso a esas cuentas.
A finales de 1.918, acabada ya la I Guerra Mundial, B.P. dijo que se necesitaban dos terrenos: uno, donde los scouts de Londres fuesen a acampar sin largos y costosos viajes y un segundo terreno donde pudiese establecer un centro de formación para dirigentes scouts.
Subitamente, ambos sueños se volvieron realidad y justamente en el mismo terreno: Gilwell Park, a unas veinte millas de Londres.
Francis Morgan, que por aquel entonces era Comisario Nacional, contó como paso todo:
“Un día, cuando andaba por los pasillos de la sede nacional, encontró un hombre de aspecto prospero y le pregunte con educación si podía ayudarle.
Dijo que quería hacer algo por el Movimiento Scout. Lo lleve entonces a mi oficina y nos sentamos para conversar sobre el asunto. Descubrí entonces que – su hacer algo por el movimiento – debía ser de la naturaleza de algunos miles de libras.
A esa altura de la conversación, le contó que es lo que estaba en la mente de B.-P. y la idea de gusto.
Volvió mas tarde para hablar con B.-P. y todo quedo acordado” Se trataba de William deBois MacLaren, un hombre de negocios escocés con enlaces en Londres.
Comenzó entonces la búsqueda de un terreno adecuado. Se nombro un pequeño comité dirigido por Sir Percy Everett que se puso inmediatamente manos a la obra. El comité visito varias propiedades sugeridas por agentes de ventas pero sin éxito.
Un día, un joven ayudante de jefe de tropa menciono a uno de los miembros del comité una propiedad que el conocía por ir allí habitualmente a observar pájaros.
Dicha propiedad se llamaba Gilwell. Con gran entusiasmo, dos miembros del comité saltaron a una motocicleta y fueron hasta allí. Era el día 8 de marzo de 1.919.
Se notaba que la propiedad estaba descuidada desde hacia mucho tiempo. Con bastante dificultad consiguieron leer el nombre del agente de ventas escrito en un panel ya muy deteriorado.
Mas tarde todo el comité visito la propiedad, que impresiono favorablemente a sus miembros.
B.P. (que se encontraba en Estados Unidos) y MacLaren fueron informados de inmediato de que era “ un terreno admirable para el fin que tenían en mente”
La compra de la propiedad fue efectuada y para perpetuar la memoria del generoso donante, un pequeño pedazo de tartán MacLaren fue colocado en el pañuelo Gilwell.
Es triste hacer notar que MacLaren no vivió el tiempo suficiente para poder apreciar el resultado global de su maravilloso ofrecimiento porque falleció en 1.921
En Mafeking donde, en el libro “El Lobo que Nunca Duerme”, B.-P. relata el incidente en el que, después de varios meses de asedio, un día en que el se sentía bastante desanimado llego a sus pies un viejo nativo zulú de elevado rango y le dio un cordón de cuero en forma de collar.
Siguiendo la tradición, este collar había sido colocado alrededor del cuello del nativo tras su nacimiento para protegerle de los malos espíritus y por tanto para traer buena suerte.
Poco después de este incidente Mafeking fue liberada por los refuerzos. El collar fue a juntarse entonces con los recuerdos que B.-P. llevaría mas tarde para Inglaterra.
En 1.919 se realizo en Gilwell el primer curso de formación para dirigentes scouts, al final del cual B.-P. se pregunto que debería dar a los jefes como signo de haber pasado el curso. Fue a casa a pensar en esto y al ojear sus recuerdos de África, hallo el famoso collar de Dinizulu.
Pocos días después, invito a todos los que habían recibido el curso para una comida en un restaurante scout en la calle Palacio de Buckingham.
En aquella ocasión regalo a cada uno de los jefes dos cuentas de collar y dio instrucciones para que comprasen un cordón de zapato y atasen una cuenta a cada extremo.
Aclarando después que esa especie de collar servia para usarla alrededor del cuello (los escritos de B.-P. indican claramente que su intención original era usar el collar de Gilwell alrededor del sombrero pero cambio de idea y finalmente decidió que se debería usar alrededor del cuello).
¡De este modo apareció la Insignia de Madera!»
En los primeros tiempos el pañuelo de Gilwell se ataba simplemente con un nudo mas, a partir de 1.921, comenzaron a usarse variadísimos pasadores para unir el pañuelo.
En los inicios de la formación, encender el fuego por fricción era una gran novedad que se acostumbraba a mostrar en los cursos Insignia de Madera.
El equipo principal necesario era un cordón de cuero, comprobándose por experiencia que era la correa de las maquinas de coser Singer la que suministraba el mejor cordón al efecto.
B.-P. sugirió a la jefatura de Gilwell Park que crease y probase un pasador especial para acompañar a la Insignia de Madera.
Así, haciendo uso de dos cordones de los de encender el fuego por fricción, Bill Shankley (que servia por aquel entonces en Gilwell) realizo una piña de dos vueltas que fue adoptada como pasador oficial.
A partir de entonces al final del curso se recibían el pañuelo y el collar de Gilwell junto con el pasador oficial.
En 1.943 el jefe de campo Gilwell pensó que debería haber alguna forma de distinguir las diversas etapas del curso. Parecía lógico atribuir una parte de la insignia de madera a quien estuviese en camino de conquistarla.
Así, a partir de 1.943 el pasador de Gilwell paso a conseguirse tras el curso básico de formación, significando que su poseedor estaba camino de conseguir la Insignia de Madera.
En cuanto al pañuelo y al collar, esos continuaran siendo entregadas tras la finalización del curso avanzado de formación.